*Invitado para estreno Mérida Fest 2021.
*Invitado especial de la Muestra Estatal de Jalisco 2022.
*Selección oficial Muestra Nacional de Teatro 2022.
Guion de: José Ramón Enríquez | Dir.: Randia y Luis Ramírez
Matthew Shepard murió en 1998 víctima de uno de los crímenes de odio más brutales de la historia de EEUU. Veintiún años, 1.58 metros de altura y 48 kilogramos, el cuerpo de Matthew agonizaba tras recibir una brutal golpiza por ser homosexual. El 12 de octubre de 1998, Shepard murió en el hospital. Poco más de dos décadas han transcurrido y, aunque Matthew se ha convertido en un símbolo de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTTTI, todavía quedan preguntas sobre el suceso, preguntas que sólo el espectador puede resolver.
Matthew Shepard murió en 1998 víctima de uno de los crímenes de odio más brutales de la historia de EEUU. Veintiún años, 1.58 metros de altura y 48 kilogramos, el cuerpo de Matthew agonizaba tras recibir una brutal golpiza por ser homosexual. El 12 de octubre de 1998, Shepard murió en el hospital. Poco más de dos décadas han transcurrido y, aunque Matthew se ha convertido en un símbolo de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTTTI, todavía quedan preguntas sobre el suceso, preguntas que sólo el espectador puede resolver.
Entre la belleza y el horror.
Los momentos más difíciles alrededor del brutal asesinato del joven estadounidense Matthew Shepard en 1998 se abordan en una cantata que se presentará mañana y pasado mañana en el teatro José Peón Contreras. “La cantata de Matthew Shepard” es el nombre de la puesta en escena, de la que José Ramón Enríquez realizó el guión, y codirigen Randia Escalante y Luis Ramírez. Se ofrecerán dos funciones por día, a las 17:30 y 19:30 horas. La obra será presencial y para mayores de 18 años, con aforo controlado. Los boletos se solicitan en www.tusboletos.mx/eventos /Merida-Fest-2021 Luis Ramírez cuenta que José Ramón Enríquez escuchó la historia de Shepard, víctima de un crimen de odio por ser homosexual, uno de los más brutales asesinatos cometidos en los Estados Unidos en 1998. En ese entonces el dramaturgo escribe un poema, pero en algún punto lo convierte en cantata, al estar trabajando con ese género. Señala que tenía el deseo de dirigir una obra de José Ramón, sin importar cuál fuera, únicamente tener el privilegio de dirigir una pieza de su autoría y así se lo hizo saber. La obra no se estrenó en su momento porque no se había encontrado el espacio adecuado para montar la pieza, ni el equipo. El montaje lo construyen conjuntamente Randia y Luis. Como actores participan Erick Manzo, quien interpreta a Matthew, Héctor Pasos y Fabián Sosa, además del tenor Emmanuel Pool Castellanos, quien se hizo cargo de la musicalización, junto con Zaabdí Hernández, actor y cantante que tiene participación en la escena. Randia detalla que en la pieza aparecen los personajes de Aarón y Russell, los asesinos; así como el fiscal de Estado y el jurado. La historia no se cuenta de manera lineal y completa, sino que se presentan los momentos más complejos alrededor del suceso y se trabaja de manera sutil con el texto de José Ramón Enríquez “que es bellísimo”, según se informó en rueda de prensa. Esa belleza de los textos, junto con el aparato musical y los sonidos generados en vivo, mientras se cuenta a profundidad algo terrible, crea un contraste. En cuanto a la propuesta audiovisual, hay un aparato escénico gigantesco y una pantalla en la que se proyectan imágenes para generar un especie de espejo de los actores, para dar al espectador la perspectiva de lo que otros ven.
La cantata forma parte del Mérida Fest “La trova va, una fiesta responsable”.
Para Randia y Luis este trabajo es parte de una trilogía que han ido materializando en la que abordan textos de Richard Viqueira y Tilo Galindo. Ya tienen listo un trabajo que es una mezcla entre el cortometraje y la escena, el cual esperan presentar pronto, y luego presentarlos juntos, pues un personaje entrelaza las historias.
— Iris Ceballos
Los momentos más difíciles alrededor del brutal asesinato del joven estadounidense Matthew Shepard en 1998 se abordan en una cantata que se presentará mañana y pasado mañana en el teatro José Peón Contreras. “La cantata de Matthew Shepard” es el nombre de la puesta en escena, de la que José Ramón Enríquez realizó el guión, y codirigen Randia Escalante y Luis Ramírez. Se ofrecerán dos funciones por día, a las 17:30 y 19:30 horas. La obra será presencial y para mayores de 18 años, con aforo controlado. Los boletos se solicitan en www.tusboletos.mx/eventos /Merida-Fest-2021 Luis Ramírez cuenta que José Ramón Enríquez escuchó la historia de Shepard, víctima de un crimen de odio por ser homosexual, uno de los más brutales asesinatos cometidos en los Estados Unidos en 1998. En ese entonces el dramaturgo escribe un poema, pero en algún punto lo convierte en cantata, al estar trabajando con ese género. Señala que tenía el deseo de dirigir una obra de José Ramón, sin importar cuál fuera, únicamente tener el privilegio de dirigir una pieza de su autoría y así se lo hizo saber. La obra no se estrenó en su momento porque no se había encontrado el espacio adecuado para montar la pieza, ni el equipo. El montaje lo construyen conjuntamente Randia y Luis. Como actores participan Erick Manzo, quien interpreta a Matthew, Héctor Pasos y Fabián Sosa, además del tenor Emmanuel Pool Castellanos, quien se hizo cargo de la musicalización, junto con Zaabdí Hernández, actor y cantante que tiene participación en la escena. Randia detalla que en la pieza aparecen los personajes de Aarón y Russell, los asesinos; así como el fiscal de Estado y el jurado. La historia no se cuenta de manera lineal y completa, sino que se presentan los momentos más complejos alrededor del suceso y se trabaja de manera sutil con el texto de José Ramón Enríquez “que es bellísimo”, según se informó en rueda de prensa. Esa belleza de los textos, junto con el aparato musical y los sonidos generados en vivo, mientras se cuenta a profundidad algo terrible, crea un contraste. En cuanto a la propuesta audiovisual, hay un aparato escénico gigantesco y una pantalla en la que se proyectan imágenes para generar un especie de espejo de los actores, para dar al espectador la perspectiva de lo que otros ven.
La cantata forma parte del Mérida Fest “La trova va, una fiesta responsable”.
Para Randia y Luis este trabajo es parte de una trilogía que han ido materializando en la que abordan textos de Richard Viqueira y Tilo Galindo. Ya tienen listo un trabajo que es una mezcla entre el cortometraje y la escena, el cual esperan presentar pronto, y luego presentarlos juntos, pues un personaje entrelaza las historias.
— Iris Ceballos
La noche del sábado también se estrenó “La cantata de Matthew Shepard”, obra que reflexiona un crimen de odio por homofobia que sacudió a Estados Unidos en 1998. A través del canto e imágenes, la puesta en escena logra reflejar cómo la misma sociedad de ese tiempo daba permiso de comportarse con odio, sin ningún tipo de restricción, con los ojos cerrados y guardando silencio a la lucha por el respeto a la comunidad gay.
En la puesta en escena, dirigida por Randia Escalante y Luis Ramírez, participaron Erick Manzo en el papel de Matthew, el personaje principal de la historia quien fue torturado y atado en un cerco en una pradera de Wyoming; Héctor Pasos y Fabián Sosa, como Russell y Aaron, personificando a los culpables del asesinato, y Zaab’di Hernández como el fiscal. El guión es de José Ramón Enríquez.
En la puesta en escena, dirigida por Randia Escalante y Luis Ramírez, participaron Erick Manzo en el papel de Matthew, el personaje principal de la historia quien fue torturado y atado en un cerco en una pradera de Wyoming; Héctor Pasos y Fabián Sosa, como Russell y Aaron, personificando a los culpables del asesinato, y Zaab’di Hernández como el fiscal. El guión es de José Ramón Enríquez.
“La cantata de Matthew Shepard” de Yucatán
Compañía: Fugaz Matthew Shepard, de veintiún años, murió en 1998 como víctima de uno de los crímenes de odio más brutales de la historia de Estados Unidos, tras recibir un ataque por ser homosexual. Aunque Matthew se ha convertido en un símbolo de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTIQ+, todavía quedan preguntas sobre el suceso, preguntas que solo el espectador puede resolver. Una puesta en escena que expuso a manera de poema dramático para música de cámara, el primer crimen de odio tipificado como tal: el asesinato de un joven homosexual. Esta obra se presentó el sábado 12 de noviembre, en el Teatro Isauro Martínez. Galeana 73 Sur, Col. Torreón Centro. Torreón, Coahuila. |
La Cantata De Mathew Shepard fue la obra invitada de la #MET2022 que llegó desde Yucatán. Un estado por demás conservador, donde en 2019, el Congreso de Yucatán rechazó en dos ocasiones aprobar la unión de personas LGBT y fue hasta 2021 que por mandato de la Suprema Corte se aprobó. Mismo año en que Eduardo Ravelo fue asesinado por policías en ese mismo estado.
Por eso me parece muy importante y absolutamente pertinente dar una ovación de pie a esta compañía que levanta (literalmente) la voz para denunciar un crimen de odio en contra de la comunidad LGBT+.
Si bien la trágica historia de Shepard sucede en un pueblo norteamericano muy ignorante, en 1998, las circunstancias y el móvil resultan brutalmente los mismos, a pesar de la distancia en tiempo y kilómetros.
Para todo hay formas, dicen. La forma es fondo.
Está compañía encontró en el musical la mejor forma de llevarnos al fondo de esta historia que ni es única, ni esporádica, ni mucho menos inusual. La entrada de los actores a escena, en una completa oscuridad, las notas y voces graves, a manera de Réquiem, no dió oportunidad a ninguna concesión.
Una propuesta visualmente muy arriesgada, donde la multimedia, protagoniza, junto con la historia y la música. Un juego visual 3D, donde los actores entran y salen de la pantalla, cómo parte de un trompe l'œil, que igual que en la realidad engaña para liberar de culpa a los asesinos de mirada "limpia" que hicieron lo "correcto para terminar con la inmoralidad". Un montaje que no necesitó más de una hora, para contarnos de manera sublime una historia profundamente conmovedora.
#SinHomofobia #NoMasCrimenesdeOdio #OrgulloLGBT
Música de Zaabdi Hernández y Emmanuel Pool
Texto de José Ramón Enríquez Dirección escénica de Randia de Sofía y Luis Ramirez
Reparto: Hector Pasos Echeverria, Fabián Sosa Garcia, Juan Jose Chacon Gonzalez, Erick Manzo Olán, María José Pool Castellanos.
Por eso me parece muy importante y absolutamente pertinente dar una ovación de pie a esta compañía que levanta (literalmente) la voz para denunciar un crimen de odio en contra de la comunidad LGBT+.
Si bien la trágica historia de Shepard sucede en un pueblo norteamericano muy ignorante, en 1998, las circunstancias y el móvil resultan brutalmente los mismos, a pesar de la distancia en tiempo y kilómetros.
Para todo hay formas, dicen. La forma es fondo.
Está compañía encontró en el musical la mejor forma de llevarnos al fondo de esta historia que ni es única, ni esporádica, ni mucho menos inusual. La entrada de los actores a escena, en una completa oscuridad, las notas y voces graves, a manera de Réquiem, no dió oportunidad a ninguna concesión.
Una propuesta visualmente muy arriesgada, donde la multimedia, protagoniza, junto con la historia y la música. Un juego visual 3D, donde los actores entran y salen de la pantalla, cómo parte de un trompe l'œil, que igual que en la realidad engaña para liberar de culpa a los asesinos de mirada "limpia" que hicieron lo "correcto para terminar con la inmoralidad". Un montaje que no necesitó más de una hora, para contarnos de manera sublime una historia profundamente conmovedora.
#SinHomofobia #NoMasCrimenesdeOdio #OrgulloLGBT
Música de Zaabdi Hernández y Emmanuel Pool
Texto de José Ramón Enríquez Dirección escénica de Randia de Sofía y Luis Ramirez
Reparto: Hector Pasos Echeverria, Fabián Sosa Garcia, Juan Jose Chacon Gonzalez, Erick Manzo Olán, María José Pool Castellanos.